Abordar temas difíciles con niños puede ser complicado. No queremos asustarles ni sobrecargarles con información que no están listos para manejar, pero también es importante que estén informados y preparados para enfrentar las dificultades de la vida. Aquí te ofrecemos 5 consejos prácticos para ayudarte en este proceso:
1. Usa términos que puedan entender
Cuando hables de temas difíciles, intenta utilizar un lenguaje sencillo y comprensible para ellos. Por ejemplo, si el tema es la enfermedad de un familiar, puedes explicar que la persona está muy enferma y que los médicos están haciendo todo lo posible para ayudarle.
2. Sé honesto, pero sensible
Los niños pueden captar cuando se les miente o se les evita decir la verdad. Sin embargo, es vital ser sensible a sus sentimientos. No necesitan todos los detalles crudos de una situación, pero sí una versión honesta de lo que está ocurriendo.
3. Dale tiempo para procesar la información
Asegúrate de darle tiempo para que entienda y procese la información. Puede que tenga muchas preguntas, así que sé paciente y dispuesto a responder.
4. Ofrece apoyo emocional
Es importante que tu hijo sienta que puede recurrir a ti en busca de apoyo emocional. Asegúrate de estar allí para él, ofreciendo palabras de confort y asegurándole que no está solo en esto.
5. Busca ayuda profesional si es necesario
Si el tema es particularmente difícil y ves que tu hijo está teniendo problemas para manejarlo, puede ser útil buscar la ayuda de un profesional, como un psicólogo infantil.
Recuerda, hablar de temas difíciles es una parte importante de la educación de los niños. No es fácil, pero con paciencia, honestidad y apoyo, puedes ayudar a tu hijo a navegar por estos temas complicados.
